Ella se levanta en más mañanas,
Él mucho antes que ella,
Ella aún lo piensa,
Él finge que no pero aún la recuerda,
Ella se promete olvidarlo,
Él su nombre ya no menciona,
Ella se pone sus zapatos y camina a la puerta,
Él usa sus pantalones favoritos.
Ella alegre sonríe a la gente,
Él ya no sonríe por que no quiere que piensen que es por ella,
Ella toma el taxi sin saber la ruta,
Él por la dieta come un poco de fruta,
Ella se topa
con aquel viejo bar,
Él se encuentra en el carro uno de los aretes que una vez le llego a regalar,
Ella se aguanta las lágrimas,
Él se aguanta la risa,
Ella sigue en el taxi sin saber a dónde va,
Él sin ella esta perdido,
Ella lleva aquel bonito vestido,
Él decide ir a su restaurante favorito,
Ella decide que no habrá algo que la obligue recordarlo,
Él se sienta en la misma mesa de la primera cita,
Ella borro su número del celular, pero lo guarda en su agenda vieja,
Él le ha querido marcar pero su orgullo no lo deja.
Ella sigue en el taxi y pasa por otro lugar especial de los dos,
Él la imagina sentada enfrente en la mesa,
Ella se enoja,
Él por fin llora,
Ella se empieza alterar,
Él no sabe si irla a buscar,
Ella para el taxi y se baja,
Él paga la cuenta y se va,
Ella se da cuenta que esta cerca del parque donde compartió con él muchas tardes,
Él camina por la calle pensando,
Ella llega al parque llorando,
Él se detiene en la tienda de la esquina y encuentra el perfume que ella usaba en sus citas,
Ella saca de su bolso su vieja agenda.
Ambos reaccionan y se dan cuenta que a pesar de querer olvidar las cosas,
Llegan sin querer a esos lugares que fueron importantes.
Ella encuentra su número,
Él decide ir al parque,
Ella piensa en sí marcar o no,
Él llega al parque pero no la ve,
Ella esta cerca de el pero no lo sabe,
Él marca,
Ella marca,
Los teléfonos suenan ocupados,
Se tranquilizan y deciden que no volverán a marcar.
Ella y él volverán,
Al círculo vicioso de pasar,
Por todos los lugares que los hacen recordar.
