Aquí me tienes,
Tentado a
buscarte de nuevo,
Se, de antemano,
Que no es lo
correcto,
Pues de ti solo
tengo desprecios,
Que no quieres
lastimarme,
Que no quieres ilusionarme,
Aunque a veces
creo,
Que con oír tú
voz tengo,
Para seguir mí
camino,
Para fingir que
aun existo,
Que aun vivo.
Me basto solo
una mirada,
Para abrirte el
corazón,
Una de tu
sonrisa,
Para ir detrás
de ti, mi amor.
Me dejaste
recorrer tu piel,
De tus labios
probar la miel,
Hoy me dejas, te
vas,
Dices que no me
puedes amar,
No tardas en
regresar,
Escudándote en
que solo lo haces,
Por no quererme
lastimar.
(CORO)
¿Qué voy a
hacer?
Con este
sentimiento,
¿Qué voy a
hacer?
Con todo lo que
siento,
¿Qué voy hacer?
Si tú no ves,
Que me tienes
aquí sufriendo,
A la espera de
un “te quiero”,
Tú conoces mis
anhelos,
Sabes que por ti
estoy muriendo,
Si no me ibas a
dar tu corazón,
¿Para qué te
dejaste amar?,
Hubiera sido más
fácil,
Poderte olvidar.
Dices que no soy
tu tipo,
Que no me puedes
amar,
Fingimos ser
solo amigos,
Aunque a veces,
Hemos tenido
encuentros íntimos,
Vienes y te vas,
Lastimándome más,
Ya deja de
jugar,
Si no me puedes
amar,
¿Por qué aceptas
mis salidas?
¿Por qué aceptas
mis caricias?
¿Por qué dices
que no me quieres ver mal?
¿La confundida
no será alguien más?
Me basto solo
una noche,
Para sufrir
todas las demás,
Una noche no me
basta,
Te quiero en
otras más.
(CORO)…
Podría haber
sido fácil,
Darme la vuelta
y olvidarme de ti,
Pero no fui
capaz, de obligar,
A mi corazón, Ponerlo
a olvidar,
Todo lo que
siente, por ti mi amor,
Fui sordo a tus
desprecios,
No baje la
guardia y seguí,
Conseguí que
fueras mía,
¿Pero para qué?,
Si no te has
cansado de repetir,
Que tu corazón
no es para mí,
Eres sal,
Y yo soy herida.
(CORO)…
¿Para qué te
dejaste amar?,
Me hubiera sido
más fácil,
Poderte olvidar,
Salir por el camino fácil,
Pero te gusta
ser la sal,
Y yo no tengo
más opción,
Que ser tu herida, favorita.